Clasificación de terrores visuales

"Las apariencias engañan.."

El libro que decidí leerme fue el de “Esto no son las Torres Gemelas” de María Acaso. Decidí leérmelo porque un día Pilar habló de él y de sus contenidos y me llamó mucho la atención.
La verdad es que yo no soy muy aficionada a la lectura, pero este libro despertó mi curiosidad hasta tal punto de querer seguir leyendo más. Me ha gustado mucho la forma de tratar los contenidos, es un libro que te adentra al mundo de las imágenes, la información que estas nos transmiten, los mensajes subliminares y la verdad o falsedad de dichos conocimientos que nos transfieren.
Gracias a esta lectura he reflexionado dándome cuenta de que realmente no hay que creerse siempre todo lo que los medios de comunicación nos cuentan, pues consiste únicamente en una serie de imágenes las cuales pueden estar manipuladas. Además, me llamó mucho la atención cómo sin darnos cuenta, absolutamente todo en la publicidad está muy estudiado en cuanto a actores, espacios, materiales, colores, ropa… Dependiendo del mensaje que nos quieren transmitir este es protagonizado por unos aspectos u otros, pero esto no es algo en lo que te fijas a primera vista, pero si más importante incluso que la propia marca que te quieren vender.
Por tanto, aconsejo que antes de sacar unas deducciones las cuales pueden ser falsas se estudie a fondo cada caso y cada elemento que forma ese conjunto.
Tras leerme todo el libro he decidido coger el capítulo 3, por ser el que más me ha gustado aunque todos me han resultado muy interesantes.

Los apuntes que tomé de este capítulo fueron:

Capítulo 3. Clasificación de terrores visuales.
Miedos con el cuerpo humano, con la clase social y bienes materiales (nos posicionan dentro de un grupo social) y los conceptos culturales (creados por los Estados, partidos y religiones).

TERRORES DEL CUERPO.
Terror a ser viejo.
Nuestra sociedad margina a quienes no son jóvenes. Cremas, tintes, cirugía…

La gerontofobia es el miedo a envejecer. El terror a ser viejo se crea mediante el asesinato visual, es decir, a través de la ausencia de representaciones visuales de viejos.

Terror a ser gordo.
Las mujeres que no alcanzan las tallas impuestas por la televisión no solo se sienten feas, sino inútiles, deprimidas, odiadas…

La belleza se identifica con el cuerpo de una adolescente de 14 años. Tal y como afirma Mernissi “los hombres convierten a las mujeres en objeto simbólico”.

La evolución del útero artificial (posibilidad de que el embarazo se lleve a cabo en una máquina) puede entenderse como la evolución lógica del miedo a estar embarazada (gorda).

Terror a no tener unos dientes perfectos.
Los dentistas no son médicos, son empresarios que anteponen los beneficios económicos a la vocación. La industria de la publicidad les complace exhibiendo como atributo imprescindible una dentadura perfecta.

Terror al pelo.
Las mujeres sufren la tortura de la depilación como miedo al vello. Los hombres terror a estar calvo unido al de no ser joven. Miedo a las canas consecuencia del terror a la vejez.

Terror a los genitales pequeños.
Que el pecho sea grande y respingón. Se enjuicia a las mujeres por el tamaño de sus pechos, la mayoría de las representaciones visuales de mujeres manifiestan delgadez extrema y enormes pechos. En los hombres el tamaño del pene está relacionado con el poder sexual y vigor de la juventud, terror a estar viejo.

Terror a estar pálido.
Tener un tono de piel dorada es símbolo de estatus, quien puede permitirse el lujo de no hacer nada y tomar el sol.

Terror a estar enfermo.
Las mujeres dicen “me he puesto mala” para referirse a que están menstruando. Así consiguen que consumamos más medicamentos, la mayoría de ellos sin necesidad real.


TERRORES DE CLASE.
Presión social por tener marcas, casa decorada de determinada manera… Terror a ser pobre.

Terror a no ir de marca.
Presión que los alumnos con ropa de marca ejercían ante los demás, marginando a quienes no las usaban. La marca proporciona un tipo de estatus.

En España, ir de Adolfo Domínguez está vinculado al PSOE, ir de Ralph Lauren con el PP.

Coches pequeños, potentes y de color rojo o amarillo para jóvenes varones; berlinas grandes grises o azules para jubilados con dinero; monovolúmenes blancos para madres preocupadas por la seguridad.

Los todoterrenos permiten al conductor estar por encima de los demás coches, genera la ilusión de un ascenso social inmediato.

Terror a no tener una casa como las de las revistas.
Exigencia de una casa bien decorada, entendiendo como bien lo que la hiperrealidad establece como el modelo.

Terror a no tener una segunda residencia.
Reservada para los más pudientes.

Terror a no poder ir de vacaciones.
El que se queda en su residencia habitual es tildado de loco o pobre y es marginado por los que sí se pueden marchar.

Ir de vacaciones significa consumir y generar aún más beneficios a los que ya los tienen. Se ha convertido en una necesidad vital, pero no realmente para descansar, sino para consumir más, comprar regalos, salir a cenar fuera…

Terror de no ver la película, serie o espectáculo de moda.
Los anunciantes pagan a las televisiones y las televisiones a las productoras. Por tanto, las series son auténticos productos de consumo, cuyo verdadero interés es el comercial. Las personas ajenas a estos fenómenos sufren el desprecio de los demás.

Terror a no ser deportista.

Terror a no estar tecnológicamente adaptado.



TERRORES CULTURALES.
A diferencia de los anteriores, estos no generan industrias, sino votos y adeptos a determinadas creencias, siendo el principal objetivo que el destinatario tome partido por un grupo específico.

Terror a no ser blanco.
Los negros son cantantes, bailarines, objetos sexuales exóticos y deportistas. No son representados como arquitectos, empresarios, médicos ni intelectuales.

Terror a ser mujer.
Estereotipo de la mujer como objeto sexual. Representaciones visuales de hombres y mujeres: Un 95% de mujeres aparecen con brazos y piernas destapados, un 5% de hombres; un 97% con la boca abierta, frente a un 10% de hombres; y un 85% recostadas y con piernas abiertas, frente a un 5% de hombres. Los hombres aparecen cubiertos con más ropa, boca cerrada y de pie o sentados. Los únicos varones con atributos y posturas parecidos a los de las mujeres son homosexuales.

Las mujeres de los millonarios les acompañan en fiestas y yates, como un trofeo más. Aportan el valor de la belleza a cambio del valor del dinero.

Las mujeres visualmente incorrectas (la bruja y la mujer fatal)

Terror a ser homosexual.

Terrores políticos.

Terror a no ser occidental, terror al tercer mundo.

Terror a no ser pro EEUU (los de mejores casas, mejor cine, más guapos, más ricos)

Terror a no ser monárquico.
Todas las princesas son maniquíes vivientes de los principales diseñadores de moda, o escaparates de utensilios deportivos como el esquí o la vela.

Terrores religiosos como el de ser musulmán.

Ainhoa Lanza. (Componente de las PALOTES)

Bueno queridas chuches, aquí tenemos el segundo comentario- resumen de otro gran libro realizado por una de nuestras componentes, esta vez hecho por Ainhoa sobre el libro "Esto no son las torres gemelas" reflejando los múltiples terrores a los que esta sometido la sociedad. Gran libro recomendado por nuestra profe Pilar anteriormente y aquí lo tenéis, si tenéis la oportunidad leedlo, es impresionante. Y continuaremos con más libros próximamente.

Las Palotes os desean suerte en la recta final !